papá no amaba a Van Gogh
supe su postura hace años
porque lo discutimos
durante el trayecto
de una ciudad fronteriza a
otra ciudad más fronteriza aún
[de él aprendí a viajar
incluso después de morir
nos trepó a sus hijos en un avión]
vivió en el norte
uno que no se relaciona
con el ideal de frontera
de mis días infantiles
en esa ciudad
las hileras de casas
cortan los cerros al límite
y las avenidas son rápidas
como su muerte fue
argumentaba
con adjetivos
poco académicos
su impresión sobre el neerlandés
que no reproduzco aquí
porque mi intención
no es que se formen
una idea equivocada de papá
por no amar a Van Gogh
por no apreciar
las minúsculas pinceladas
que requirieron
un rigor de loco
un destello de genio
no
digo que de haber sabido
que moriría al poco tiempo
yo misma hubiese parado la discusión
para hablar de otro pintor que él sí apreciara
o esa tarde, al terminar el viaje en carretera
me hubiese sentado a fumar con él
aunque no fumo
y lo haría en silencio
sólo por observar
cómo miraba la vida