Categorías
Poesía

Denise Duhamel. Dos Poemas.

POCOS DÍAS DESPUÉS

mi cuñado se cayó del tejado,
un nido con cinco pajaritos también.
Mi hermana trató de reponerlo,
pero la madre no iba a regresar,
y unas horas más tarde el nido volvió a caerse.
Mi cuñado estaba en el sofá,
durmiendo a base de Percocet, cuando mi hermana
se arrodilló en el suelo con un cuentagotas
con leche de soja. Tres de las crías ya estaban muertas.
Llamó al primer veterinario de la lista telefónica.
Mi cuñado se despertó y pidió
zumo, pero mi hermana le hizo bajar la voz
pues estaba hablando por teléfono
con un veterinario que le comentaba que podría probar
a alimentar a los pájaros con comida para gatos mojada en un bastoncillo.
Le llevó un zumo de naranja a su marido
y salió pitando hacia el supermercado, olvidándose de preguntarle
a mi cuñado si necesitaba alguna otra cosa.
Mi hermana estuvo fuera durante una hora, pero los pajarillos
no quisieron abrir sus pequeños picos. No podía dejar de
llorar, mirando el tejado, consciente por primera vez
de la altura desde la que había caído su marido. Luego miró al cielo
preguntándose qué sería lo próximo en caer.

***

SEXO CON UN POETA FAMOSO

Anoche tuve sexo con un poeta famoso
y me estremecí cuando di la vuelta y me encontré al lado suyo
porque yo estaba casada con otra persona
porque no tendría que haber estado bebiendo
porque me encontraba en un hotel lujoso
que no reconocí. Debí haberte dicho
de inmediato que lo anterior era un sueño, pero
un amigo me dijo, escribe acerca de un sueño,
pierde un lector y no quería perderte
de inmediato. Quería que me escucharas,
que supieras que ni siquiera me gusta el poeta del sueño, que él tiene
cuatro hijos, el más joven de mi edad, y que lo encuentro
muy poco atractivo, que sólo lo vi una vez,
me refiero en la vida real, y que fue junto a un grupo inmenso
con el que apenas pude hablar. Él me resultó desagradable
con sus observaciones despectivas sobre las mujeres.
Incluso usó la palabra “Japo”
que tomé como un ofensa directa hacia mi esposo que es asiático.
Cuando estábamos en nuestra primera cita, le dije
“Anoche estuviste hablando mientras dormías
y te escuché sólo para asegurarme que no
mencionarías el nombre de nadie más”. Mi futuro esposo dijo
que no podía responsabilizarse por su subconsciente
lo cual me preocupó e hizo pensar que sus sueños
estaban llenos de rubias en bikinis de piel de conejo.
Pero él dijo que no, soñaba sobre todo peñascos
y con océanos y con volcanes, climas extremos
a los que presenciaba sin poder detenerlos
Y yo le dije, “sólo sueño contigo”,
lo cual era romántico, tonto y falso.
Pero nunca pensé que podría soñar con otro tipo—
mi esposo y yo nunca tuvimos un sólo conflicto,
mi cabeza acomodada dulcemente en su axila, mi brazo
alrededor de su vientre, moviéndose de arriba abajo
la noche entera, poco a poco, cual agua en un lago.
Si me topara con aquel poeta famoso en la calle,
él seguiría andando, célebre bajo sus lentes obscuros
y un blazer con los parches de gamuza en los codos,
sin ceder una sola mirada en mi dirección.
Sé que quizás sientes curiosidad por saber quién es este poeta,
así que debo decirte que las pistas que he dejado
no son certeras, que he disfrazado su identidad,
nunca deberías intentar adivinar quién es…
porque jamás atinarás la respuesta correcta
y si acaso llegaras a hacerlo, no te diría que lo has logrado.
No podría avergonzar a un extraño
que, a fin de cuentas, podría ser una buena persona,
que quizás sólo estaba teniendo un mal día cuando lo conocí,
alguien que tal vez esté un poco cansado de la fama—
que mi esposo y yo consideramos como grandiosa,
aunque en realidad no sé qué tanta fama pueda tener un poeta americano
si, digamos, lo comparas con una estrella de rock
o un director de cine del mismo talento. No tanta,
y el poeta famoso lo sabe, sabe que
no es famoso de verdad si mira sus deudas. Sabe que muchos
de estos jóvenes poetas que jalan sus mangas
tan sólo fingen que han leído todos sus libros.
Pero sonríe de cualquier forma, trata ser útil.
Digo, este poeta tiene algunas cualidades que lo redimen, ¿no es cierto?
Por ejemplo, escribe algún verso yámbico.
De otro modo, qué hacía yo en sus brazos.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.