El camino es abandono nunca
hallazgo.
Sin rostro ya la flor, la torre,
y el cuadro despintó toda
apariencia.
Por supuesto tú dices: ¡He aquí! Y
nombras
todo lo que de propio defiende con el
sol la primavera.
Mas ¿cómo ha de ser cálido el verde
cuando es noárbol, norroble,
nosauce?